
- On 19 mayo, 2025
- In Blog
- Tags
La famosa Montaña de 7 Colores, también conocida como Vinicunca, es uno de los destinos naturales más sorprendentes del mundo. Su peculiar gama de tonalidades, que va del rojo al amarillo y al verde, la convierte en una parada obligatoria para quienes visitan Cusco. Pero lo que muchos no saben es que este lugar no es solo una montaña: en sus alrededores existen paisajes igualmente mágicos que merecen ser explorados.
Desde lagunas de colores únicos hasta valles de tonalidades intensas, pasando por majestuosos glaciares y una rica fauna silvestre, la ruta hacia la montaña de 7 Colores es toda una experiencia andina que combina naturaleza, cultura y espiritualidad. A continuación, te presentamos los principales atractivos turísticos de Vinicunca que puedes conocer en el camino a la Montaña de Colores.
Montaña Ausangate: El guardián de los Andes
Contents
Durante el trayecto hacia la Montaña de Colores, una de las primeras maravillas que se revela ante tus ojos es el Ausangate, una de las montañas más altas del Perú con sus imponentes 6,372 metros sobre el nivel del mar. Esta montaña forma parte de la cordillera del Vilcanota y es considerada sagrada por las comunidades locales, quienes la veneran como un Apu, o espíritu protector de la naturaleza.
El Ausangate no solo destaca por su altura, sino por ser el corazón de varias rutas de trekking que atraviesan paisajes de otro mundo: lagunas turquesas, glaciares milenarios y pueblos que conservan intactas sus costumbres ancestrales.
Valle Rojo: Un secreto bien guardado cerca de Vinicunca
A solo unos kilómetros de la Montaña de Colores, se encuentra una joya natural que ha ganado popularidad en los últimos años: el Valle Rojo. Este lugar sorprende con sus laderas completamente teñidas de rojo intenso, producto de la alta concentración de minerales en el suelo.
Al caminar por el valle, te sentirás inmerso en un paisaje marciano, donde el silencio, el viento y el color predominante crean una atmósfera mágica. Si tienes suerte, incluso podrás ver vicuñas, aves andinas o zorros cruzando la ruta. Además, conocerás de cerca el estilo de vida de las comunidades altoandinas que habitan esta zona remota del Cusco.
Laguna Puka Qocha: La sorprendente laguna roja
Uno de los secretos mejor guardados del Ausangate es la Laguna Puka Qocha, cuyo nombre significa «laguna roja» en quechua. Su coloración única se debe a los minerales acumulados en el agua, especialmente visibles durante la temporada de lluvias, cuando los sedimentos de las montañas cercanas se mezclan con sus aguas.
Llegar a esta laguna requiere una caminata exigente de dos días, pero la recompensa es inmensa: paisajes únicos, poca presencia de turistas y la posibilidad de vivir una experiencia íntima con la naturaleza andina.
Laguna Qomer Qocha: El espejo verde de los Andes
Otra maravilla natural del entorno de Ausangate es la Laguna Qomer Qocha, conocida como la “laguna verde” por sus intensos tonos esmeralda. Su coloración se debe a las algas y minerales presentes en el agua, además de los reflejos de las montañas y el cielo.
Esta laguna también forma parte de los recorridos de trekking de dos días, ideales para quienes buscan desconectarse del mundo moderno y sumergirse en la majestuosidad de los Andes. Desde sus orillas se tiene una vista privilegiada del glaciar Ausangate, creando un escenario perfecto para los amantes de la fotografía y la naturaleza.
Glaciares de Surimana y Hatun Ritty: Gigantes de hielo
Como parte del nuevo circuito que complementa la visita a Vinicunca, destacan los glaciares de Surimana y Hatun Ritty, ubicados a más de 4,850 msnm. Estos glaciares se alzan como murallas de hielo en medio de la cordillera del Vilcanota y ofrecen vistas sobrecogedoras para quienes se atreven a explorarlos.
Ambos glaciares pueden apreciarse desde distintos puntos del camino, especialmente si optas por una excursión de varios días. Son también el escenario perfecto para entender cómo el cambio climático está afectando estas antiguas masas de hielo.
Fauna silvestre: La vida que habita los Andes
La fauna andina que rodea la Montaña de Colores es otro atractivo en sí mismo. Durante tu recorrido, podrás observar rebaños de alpacas y llamas, animales esenciales en la economía y cultura local. También hay posibilidades de ver vicuñas, guanacos, zorros andinos e incluso el majestuoso cóndor andino, el ave voladora más grande del mundo.
Toda esta biodiversidad forma parte de un ecosistema frágil y protegido, por lo que la caza está estrictamente prohibida en la zona, según disposiciones del Gobierno peruano para la conservación de estas especies en el Área de Conservación Regional.
Consejos para disfrutar al máximo tu visita
- Aclimatación previa: La Montaña de Colores y sus alrededores superan los 5,000 msnm. Se recomienda aclimatarse en Cusco al menos dos días antes del viaje.
- Ropa adecuada: Lleva ropa abrigadora y en capas, impermeable, bloqueador solar, gafas con protección UV y gorro para el frío.
- Calzado de trekking: Indispensable para caminar por terrenos irregulares y húmedos.
- Respeto por la naturaleza y la cultura local: No dejes residuos, no alteres la fauna y respeta las costumbres de las comunidades.
- Tour de varios días: Si deseas explorar todas estas maravillas, lo ideal es contratar un tour de dos o más días con agencias especializadas.
En conclusión
Visitar la Montaña de Colores es mucho más que ver una montaña multicolor: es adentrarte en un universo natural y espiritual que ofrece paisajes de otro planeta, experiencias únicas y una conexión profunda con los Andes. Los alrededores de Vinicunca están llenos de tesoros escondidos que te dejarán sin aliento.
Si tienes espíritu aventurero y sed de descubrimiento, no te conformes solo con la foto en la cima. Explora, siente, respira y conecta con todo lo que este rincón del Cusco tiene para ofrecerte.